jueves, 21 de junio de 2012

Oxitocina.

Te he escrito mil cartas, 
de las cuales pienso sólo una llegarías a leer. 
Te he recitado millones de poemas, 
de los cuales ninguno has escuchado. 
Te he dicho millones y millones de veces te quiero… 
Y no sabes cuánto desearía verte sonreír 
al apenas haber salido de mis labios. 

16:15

Se abrieron las puertas y tu entraste. Al hacerlo, me miraste inmediatamente. Te correspondí y tu mirada escapó. Sonreí, tu no. El trayecto, similar. Cuando te tocaba bajar, me volviste a mirar. Te correspondí. Sonreíste, yo no. Te quedaste mirándome desde el andén, hasta que tu madre se dignara a mover el coche.